sábado, 8 de mayo de 2010

CRONOLOGÍA DEL DÍA DESDE EL PUNTO DE NO RETORNO.

07:00h. Comienza mi última guardia. El recién estrenado sol no acaba de quitarnos de encima el frío de la noche como en los 3 días pasados en los que la navegación fue muy placentera. Ligeros vientos del Oeste que nos entraban por el través en nuestro afán de ganar Norte, nos mecían en un mar sosegado y nos empujaban consiguiendo las mejores medias de velocidad y millas recorridas.

En la madrugada pasada que arrancamos el motor, hemos entrado en una zona de calmas que espero que pase rápido ya que no estamos para muchas alegrías con el gasoil. No paramos de otear el horizonte esperando divisar las manchas en el mar que revelan la llegada de nuestro preciado aliado.

Además, hubo alguna novedad en cuanto a la pesca. No sirvió de mucho ya que el dorado y el otro pescado que no conocíamos los absolvimos y devolvimos a su hábitat en vez de buscarles acomodo en nuestra sartén. No sé si nos habrá enternecido el documental que hemos visto sobre los osos polares, morsas y focas del National Geographic o que, verdaderamente, llevaban la etiqueta de pezqueñines. El resto, delfines, ballenas e incluso peces voladores: nada de nada. ¿Qué le pasa a este mar? Lo único que nos manda son Carabelas Portuguesas.

Sin embargo, por aire llega, casi siempre en los atardeceres, mi amigo el ave negra que me dió el susto en los primeros días de navegación desde Antigua. Se ha familiarizado con el velero y se acerca a saludar aunque no tanto como la otra vez. Ha aprendido la lección. Al menos esa lección porque ayer aprendió otra nueva: el pulpito que esta haciendo esquí acuático enganchado del barco no es para comer y te puedes hacer mucho daño. Se pensó que era comida y después de dos pasadas para coger confianza, se lanzo a por el cebo. El resultado: enganchado de un ala por el anzuelo. Afortunadamente, se zafó mientras Alfonso jalaba del sedal hacia el barco. No hubiera respondido de sus actos si hubiera abordado el barco en esas condiciones.

10:00h. Debídamente desayunados, nos pusimos manos a la obra con la rutina diaria. Toca señalar y marcar la posición en la carta náutica. Por cierto, esta quedando preciosa con todas sus marcas de la travesía de ida y lo que llevamos de vuelta. A buen seguro estará en un lugar bien visible de la casa. Y no admite negociación, cariño. Al efectuar esa marca nos damos cuenta que estamos justo en la mitad del Atlántico. En el punto de NO RETORNO, ya no hay vuelta atrás. Nos quedan 1.047 millas para San Miguel aún, escasos de gasoil, lo justo de agua dulce y previsiones no muy favorables.

12:30h. Saboréo mi reencuentro con la victoria en el juego de la "escoba", de cartas. Primera partida desde que zarpamos el pasado 26 de Abril y el Valentino Rossi cae derrotado por el aspirante. Después nos distraemos viendo pasarnos por la popa al "Energy Protector", un gran mercante que después de nuestra experiencia con el buque que casi nos aborda hace unos días, no le quitamos ojo. Esta vez sin complicaciones. También él sufre a pesar de su gran tonelaje por el fuerte balanceo que nos provoca el maretón que tenemos ahora.

13:00h. Ahora sí que aprieta el calor. Hasta la próxima nube que cubra el sol, a dorarse toca. Es la hora de bajar el parte meteorológico que no nos dá buenas noticias. Estaremos encalmados hasta mañana sábado que entrará muy poco viento. Lo del lunes sí que son malas noticias ya que entran vientos del E, totalmente enfrentados a nuestro rumbo hacia Azores. El problema es que lo poco que debamos ceñir a vela nos sacará mucho de nuestra derrota. Pocas opciones quedan. Si ponemos el motor y arriamos las velas no vale de mucho ya que con tanto viento en contra nos quedaremos parados, y lo que es más grave, gastando el poco gasoil que nos queda.

No es para alarmarse, ni mucho menos, pero nos fastidia ya que estos vientos del E no son nada normales en estas latitudes en estas fechas y harán, si se confirman los partes, que perdamos 1 o 2 días a nuestra arribada al archipiélago portugués. A pesar de estas perspectivas, y a causa de mis pensamientos positivos, me dispongo a continuación a dormir la conocida "siesta del obispo".

14:45h. Empezamos a degustar el menú del día: "ensalada de calmas", no es mas que una variante de la ensalada malagueña pero con más ingredientes que el chef Manzaneque ha sorprendido a bordo del Peter´s Boat. Exquisita. Al chef le toca ahora, como es de justicia, la siesta, la de toda la vida. Después de fregar los cacharros toca lectura en la cubierta si el calor acompaña.

18:45h. ¡Tres horas y media de siesta se ha echado el sinvergüenza! Yo las pasé leyendo. Empecé un libro que me regaló mi cuñada. Es de autor finlandés, como ella, se llama Jan Contin Wagner y el titulo: "Silencio de Hielo" y le he pegado un repaso de 128 páginas. Me ha atrapado mucho la trama, gracias Miia, seguro que no llega a la 3ª guardia.

Ahora llamaré a casa, a mi gitana, para ver como le ha ido en el trabajo y cómo está el little Pedro. Aunque tenga que hacer tripas de corazón y aguantar el nudo que se me hace en la garganta cada vez que pienso en él e imaginármelo en las situaciones que me cuentan. En fin, ya queda menos.

20:00h. Somos espectadores de otra nueva puesta de sol. Son todas diferentes. Me retiro al camarote a ganar sueño a las guardias de la noche, que entro a las 23h. Miento, no es un nudo en la garganta, es una pelota de baloncesto que en la soledad de mi camarote intentaré quitarme.

Alfonso, despejado y bien abrigado, se queda en cubierta pensando en la táctica para encarar estos días que se nos avecinan y llegar de la manera más segura y rápida.

01:00h. Finaliza mi primera guardia. Sin novedad, calma total, a motor. A descansar dos horas hasta la siguiente.

07:00h. Empieza mi última guardia. Sin novedad desde la posición Lat. 32º 43´N, Long. 44º 10´W. nos desplazamos a 5 nudos, rumbo 63º. Acabo de echar el curricán a ver si hoy toca proteína fresca. Soy muy cabezota y todavía tengo fé.

Cada guardia ha sido un calco de la anterior. En la primera leí otras 50 páginas del libro. En la segunda, escuche el programa de radio "la rosa de los vientos" de la que soy fiel oyente. Llevo mi mp3 cargado de todos los programas desde hace varios años. Además de otros podcast de viajes como "levando anclas", "ser aventureros" y más. Este aparato, es uno de mis tesoros más preciados ya que me distrae mucho en momentos en los que me desplazo en el coche, avión o ahora en el barco.

En fín, ésta es la cronología de un día cualquiera a bordo del Peter´s Boat. Normalmente las rutinas son las mismas. Como veis no ocurren grandes cosas pero, a la vez, es un viaje mágico donde el mar con sus grandes ondulaciones o sus calmas misteriosas, la brisa marina que te refresca el rostro de la manera más pura, el viento que aparece y desaparece a disgusto de nuestras posesivas velas, el sol intentando seguir nuestro rodeo a su alrededor con la mayor luz y calor posible y las nubes con sus dibujos caprichosos a parte de alguna otra sorpresa que te aparece sin esperarlo, nos hace estar como en otra dimensión.

Me despido hasta mañana, mandando un fuerte abrazo de agradecimiento a los amigos que, en tierra, se están encargando de mandarnos sus impresiones sobre los partes que van llegando. Gracias Piti, Rafa, Jorge y Pico.

Feliz fín de semana.

1 comentario:

  1. ufffff.......esta vez ,has conseguido que se me salten las lagrimas.
    Solo puedo desearos,desde aqui ,buenos vientos
    y que el mar sea fiel con vosotros.
    Un saludo
    Laura

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